miércoles, julio 05, 2006

Así en abstracto


De vez en cuando, entre tanta mediocridad, aparecen mentes geniales que, aunque no hagan grandes descubrimientos científicos o no tengan un lugar en la historia, nos enriquecen la vida con sus creaciones. Si además estas coinciden con tus gustos y tu forma de pensar pueden volverte un poco loca loquita loca.
Este es el caso de Manolo y Genís (Astrud).
Como no podría recomendar ninguna canción en concreto ni ningún disco porque todos me parecen espléndidos, pongo este enlace de un artículo de Manolo en la revista Vanidad donde antes publicaba. Que lo disfrutéis!

Comments:
¡Qué peaso mariquitaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas!

Lo siento guapa, ya sé que te gustan mucho, pero tenía que decirlo. :P
 
Cariño, cada día tienes unos gustos más raritos... anda que me tienes contenta..
Jejeje. Tu hermanita patachuli
 
Ya tengo yo ganas de escuchar mas profundamente a esta gente, que solo he escuchado cosas sueltas en tu casita. Le voy a decir a Alf que me piratee algun album (ya que no recomiendas ninguno en concreto)pa escucharlos, que yo creo que a mi tambien me van a molar...
 
De verdad, de verdad, qué paciencia hay que tener, Dios mio.
Espero que algún día la luz del buen pop ilumine los corazones de esta sociedad que vive tan en penumbra!
Ah!Mariquita Genis es bastante ("y Bécquer que era un poco mariquita también") como bien cantaba él mismo en "Qué malos son nuestros poetas", pero que sepas que los tacones le quedan muy bien, eh?. Pero Manolo, el de la izq, es mu macho, o si no que lo diga Ricardo, qué momento cuando nos lo encontramos en La Vaca Austera.
 
Doy fe. Es un macho de los que escasean en España. Nos lo encontramos Elena y yo en el garito ese, y la pobre se puso de los nervios. Normal, es su ídolo más grande. Yo me puse igual cuando ví al mismísimo Leonardo Dantés en un garito gay de Chueca, pero esa es otra historia... Elena no tenía papel para el autógrafo, así que sin pensárselo ni un segundo, trincó un billete de 5 euros (que son casi mil pelas!) y se lo largó al tío. El hombre, abrumado por la situación, decidió que su autógrafo no valía los 5 euros, y al final le firmó en un panfleto de no sé qué cosa. Qué modesto el chaval. Luego estuvimos espiando lo qe hacía, porque le rondaba una pelandusca con muy malas intenciones... Una noche muy simpática.
 
Pues que sepas que yo los he visto ya en directo dos veces, y las que caigan... :)

Bonito blog, te voy a hacer un rinconcito en mi hogar :)
 
Publicar un comentario



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?